Irene Rodríguez: La isla de las mujeres del mar. Lisa See. Reseña

Título: La isla de las mujeres del mar.

Título original: The island of sea women.

Autor: Lisa See.

Año de publicación: 2019.

Género: Narrativa.

Puntuación: 8,5 sobre 10.

Una inmersión fascinante en una cultura en vías de desaparición.

Tras seducir a lectores y críticos de todo el mundo con El abanico de seda y Dos chicas de Shanghai, Lisa See vuelve a cautivarnos con La isla de las mujeres del mar, una bella e introspectiva novela sobre los lazos de amistad de dos jóvenes hanenyeo -mujeres buceadoras de la isla surcoreana de Jeju, cuya forma de vida ha sido reconocida por la Unesco como patrimonio de la humanidad- y las poderosas fuerzas, tanto naturales como históricas, que las rodean.

Kim Young-sook y Han Mi-ja empiezan su preparación como haenyeo. A pesar de sus diferentes entornos familiares, pronto se hacen íntimas, aprenden la técnica del buceo y se enfrentan juntas a las exigencias físicas y los fracasos emocionales de su trabajo. Durante medio siglo, las dos jóvenes forjarán una sólida relación al tiempo que su vida se verá envuelta en acontecimientos tan trágicos y extraordinarios como la Segunda Guerra Mundial, la Guerra de Corea y sus secuelas, y tan inevitables como la irrupción de los teléfonos móviles y la llegada de nuevas políticas e ideas a la isla. Sin embargo, tras sobrevivir a cientos de inmersiones y desarrollar el más estrecho de los vínculos, algo que escapa a su control acabará rompiendo su amistad.

Narrada por la entrañable voz de Young-sook, La isla de las mujeres del mar es no sólo una magnífica saga familiar con extraordinarias ramificaciones, sino también un vívido retrato del mundo singular y poco conocido de la isla de Jeju y de las atrocidades sufridas por sus moradores bajo la ocupación japonesa.

Esta novela está narrada en dos tiempos diferentes, presente y pasado, eso hizo que me costara un poco meterme en la historia; sin embargo, una vez dentro, no te deja salir. Engancha muchísimo y siempre me quedaba con las ganas de saber qué iba a pasar.

Es una historia de lucha, de una vida dura y trabajada. De familia, amigos, y perdón. Es una novela intensa, con una mujer muy fuerte como protagonista. Una mujer fuerte, pero no perfecta. Una mujer que ha vivido mucho, pero también ha perdido mucho y lleva un enorme peso sobre sus hombros. Es uno de los personajes femeninos que más me ha gustado de los últimos libros que he leído. Una mujer empoderada, pero real. Con sus defectos y sus virtudes, como todas nosotras. Una mujer trabajadora en una época en la que, en otros lugares, los hombres eran los únicos que tenían poder de decisión. En Jeju las cosas eran diferentes, a las haenyeo no las tosía nadie. Eran mujeres, madres y esposas.

No tengo mucha idea de historia coreana y me ha parecido muy interesante conocer lo que sucedió en esta isla del sur de Corea. La autora deja muy bien reflejado que, al final, en las guerras, la población es la que más pierde. Sabía que Corea y Japón tuvieron muchos problemas en el pasado y por eso todavía hay resquemor. Este es el primer libro que leo en el que esos conflictos aparecen y si pasó tal y como aquí se cuenta… No me extraña que no los quisieran ver ni en pintura. Pero también me ha gustado mucho que no hayan puesto a Estados Unidos como el salvador. Llegaron, sí, expulsaron a los japoneses invasores, pero lo que dejaron en la isla de Jeju no fue, ni mucho menos, mejor que lo que antes había.

Por último, quiero hacer mención al trabajo de las haenyeo. Buceadoras del fondo marino en el que cada día podía ser el último. Que la vida de una persona sea reconocida por la Unesco no es poca cosa. Me ha parecido impresionante la valentía y tenacidad de estas mujeres. Una fortaleza física y mental dignas de admirar. Si alguna vez viajo a Corea, Jeju estará en la lista de lugares a visitar.

Un libro muy recomendable. No es un paseo tranquilo por la vida, pero es muy interesante.

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